Cuantas veces se me vuelve el mundo
Tan invitante, tan bonito, tan ameno.
De tantos colores que, en un segundo
de vil torpeza, te amo menos.

Cuantas veces hay tantas luces;
Tantas mentiras. Tantas promesas.
Glorias terrestres que le reducen
A mi afan de servirte las fuerzas.

Y es que no se ni lo que digo;
Me das todo y digo que nada
recibo del vivir contigo.
Ay, torpe mente tan engañada.

Te amo, Jesus Cristo,
No he de marcharme.
Tu tienes Palabras de Vida.
Palabras que no,
no puedo olvidarme
cambiaron mi vida
que estaba perdida.

Y es que, Señor, son tantos lazos
que me tiende siempre el malvado Satan
para no seguir tus pasos.
Ay, que disfraz tan bello tiene el pecado.

Y cuantas veces he decidido al pecado volverme,
Ya no seguirte.
Con amor me has preguntado:
Es que tambien tu quieres irte?

Y es que no se ni lo que digo;
Me das todo y digo que nada
recibo del vivir contigo.
Ay, torpe mente tan engañada.

Te amo, Jesuscristo,
No he de marcharme.
Tu tienes Palabras de Vida.
Palabras que no,
no puedo olvidarme
cambiaron mi vida
que estaba perdida.